El viernes, Gianinna Maradona reveló que se encuentra «profundamente afectada» debido a la decisión de los tribunales franceses de permitir la subasta del Balón de Oro 1986 de su padre, Diego Armando Maradona. Este trofeo no pudo ser disfrutado por Maradona durante su vida ya que fue robado «violentamente» en 1989.
Recibimos la noticia sobre la decisión y nos duele enormemente, por el recuerdo de nuestro padre
Gianinna Maradona
«Nos enteramos de la sentencia y nos duele enormemente, en honor al recuerdo de nuestro padre. Hemos interpuesto un recurso de apelación y confiamos plenamente en que se revocará la sentencia, ya que hemos demostrado que el Balón de Oro le fue robado a mi padre y que el robo fue de conocimiento público», comentó Gianinna a EFE. Gianinna es hija de Maradona y Claudia Villafañe, habiendo nacido en 1989 como resultado de su relación.
Los herederos de Maradona, incluyendo a Gianinna y a su hermana Dalma, habían pedido a la justicia francesa que frenara la subasta del Balón de Oro planteada para el 6 de junio en la casa de subastas Aguttes. Dicho evento se celebrará en Neuilly sur Seine (cerca de París).
Como herederos, es nuestra responsabilidad buscar recuperar lo que nos corresponde
Gianinna Maradona
El premio, que estuvo desaparecido durante décadas, se compró por una cantidad insignificante (1,20 euros) por un coleccionista aficionado en una subasta de segunda categoría en París en 2016. «Por una cuestión de justicia, y en honor al recuerdo de nuestro padre, como herederos, es nuestra responsabilidad buscar recuperar lo que nos pertenece. El premio fue robado violentamente antes de que él pudiera disfrutarlo», añadió Gianinna, quien le dio a Maradona un nieto como resultado de su relación con el ‘Kun’ Agüero.
¿10 millones de euros?
Si finalmente llega a subastarse, el trofeo de Maradona podría sobrepasar los 10 millones de euros, convirtiéndose en el artefacto deportivo más costoso en la historia. Los demandantes, representados en Francia por el abogado Gilles Moreau, afirman que el trofeo le fue robado a su padre en 1989, en un atraco planificado por la mafia italiana al Banco della Provincia, en Nápoles y critican que no hubo buena fe por parte del actual propietario del objeto, un modesto coleccionista franco-argelino llamado Abdelhamid B.
No obstante, el tribunal francés respaldó este jueves la argumentación de Abdelhamid B. y de la casa de subastas Aguttes. Ellos sostienen que Abdelhamid B actuó de buena fe durante la compra, ya que no sabía que estaba adquiriendo un Balón de Oro.
¿Sin demanda?
Al margen, consideraron que ya pasaron más de tres años sin que nadie de la familia Maradona hiciera preguntas sobre el objeto, por lo que, conforme a la ley francesa, Abdelhamid B. es el legítimo propietario.
Paralelamente al proceso judicial de los herederos, la Oficina Central de Tráfico de Bienes Culturales de Francia está investigando si existió delito de «encubrimiento de un objeto hurtado» por parte del coleccionista.