Scottie Scheffler Gana su Tercer Grande
Con más **tensión** de lo esperado y sorprendido por lo que se mostró en el campo, Scottie Scheffler logró su tercer grande a los 28 años. Este fue el primer torneo que ganó fuera del Augusta National. Aunque tuvo que enfrentar a Jon Rahm, quien dejó claro que no se rendiría. Rahm, que comenzó a cinco golpes de la cabeza, inició una fuerte remontada en los primeros 15 hoyos, desafiando al campeón.
El emocionante **domingo**, que fue soleado y con viento, ponía a prueba a Scheffler. A pesar de sus errores, su juego corto lo salvó en varias ocasiones. Aunque cometió tres bogeys en los primeros nueve hoyos, también logró un birdie, manteniendo sus opciones de victoria. Sin embargo, la presión fue palpable y el público anhelaba ver cómo Rahm podría aprovechar cualquier fallo del líder. Finalmente, fue Jon quien decidió tomar el reto.
Cuando Rahm logró un birdie en el hoyo 8, parecía que los vientos estaban cambiando. Tras algunos problemas de rendimiento, especialmente desde el tee, comenzó a hacer frente a Scheffler, quien continuaba teniendo sus altibajos durante la jornada. Rahm encadenó dos birdies y se acercó al líder, lo que hizo que el torneo se encendiera nuevamente.
Un Jon Rahm Renovado
De repente, Jon se quitó la presión que había sentido desde que firmó contrato con el LIV. Sus problemas anteriores, relacionados con su **swing**, parecían haber quedado atrás. Desde su desempeño en el Masters, donde mostró destellos de su antiguo nivel, ahora parecía estar de vuelta, manejando la bola con precisión y buscando oportunidades en cada hoyo.
Sintiendo la presión de cada golpe, Rahm se enfrentó a un par 4 en el hoyo 14. Sin embargo, un bote desafortunado le jugó una mala pasada, enviando la bola a un bunker cuando debía salir con un **birdie**. Scheffler, por su parte, había recuperado su juego y aprovechó esto para ampliar la distancia, mientras Jon luchaba por mantenerse en la pelea.
Finalmente, en el difícil final del Quail Hollow, un bogey en el hoyo 16 y un error en el 17 complicaron aún más la situación para Rahm, quien había comenzado la jornada con grandes expectativas. Con otro error en el 18, su jornada concluyó con una tarjeta de dos sobre par (73). No reflejaba lo que había mostrado en las horas anteriores, dejando una sensación de que pudo haber sido mejor.