Un Renacimiento en la Arquitectura Española
En momentos diferentes, España ha experimentado lo que se conoce como un milagro dorado. Esto sucede porque el talento no es constante y se distribuye entre distintas generaciones. Hubo un Siglo de Oro en la literatura, con figuras como Cervantes y Quevedo, y también en las artes, destacando a Velázquez. Actualmente, parece que estamos viviendo un nuevo Siglo de Oro, pero esta vez en la arquitectura. La profesión ha cobrado fuerza tanto en el país como en el extranjero, donde España, un mosaico de reinos, ha dejado una huella significativa. En la actualidad, muchos profesores españoles enseñan en universidades de renombre, como Columbia, Harvard y el MIT. Andrés Jaque, por ejemplo, es el decano de Arquitectura en Columbia.
El número de arquitectos españoles reconocidos es notable. Algunos de ellos son Ábalos y Herreros, RCR, Calatrava y Moneo. Aunque las grandes firmas internacionales dominan el mercado, todo arquitecto que elige esta carrera lo hace por vocación. RCR, premiado con el Premio Pritzker, facturó 3,36 millones de euros en 2023, un monto significativo considerando que sus proyectos transforman espacio y comunidad. Rafael Moneo, quien también es reconocido, facturó 675,000 euros con un equipo pequeño. Esto demuestra que ser arquitecto no solo se trata de ganar dinero, sino de tener un impacto en el entorno.
La Sencillez de la Belleza Arquitectónica
La belleza en la arquitectura reside en su simplicidad. Un ladrillo, por ejemplo, puede convertirse en una obra maestra como el Museo Nacional de Arte Romano en Mérida, diseñado por Moneo. La forma en que los materiales se usan para crear espacios ha sido tradicional en algunas áreas de España. En este contexto, la firma IDOM de Bilbao reportó unas ventas de 53 millones de euros, destacándose en el ámbito financiero. Otros estudios, como el de Bofill, mostraron ingresos también destacados. La geometría se ha vuelto un pilar clave, como lo demuestra Batlle i Roig, con ingresos de 17,53 millones.
A lo largo de los años, la arquitectura ha enfrentado distintos retos, desde la crisis financiera de 2008 hasta los problemas de deuda en 2012. Sin embargo, hoy parece estar floreciendo. Según Rafael de La-Hoz, la educación y el legado de arquitectos anteriores han sido fundamentales para llegar hasta aquí. La historia de la arquitectura española es rica y ha sido influenciada por aquellos que decidieron compartir sus conocimientos.
La Generosa Fiesta de la Generación de Arquitectos
Después de la Guerra Civil, quedó mucho por hacer y muchos arquitectos continuaron enseñando. Miguel Fisac, aunque no dio clases, dejó su impronta a través de su trabajo. Tener profesores como Javier Carvajal o Francisco Sáenz de Oiza representó un cambio hacia la modernidad en un país que necesitaba avanzar. Aun con las dificultades, esta rica tradición ha permitido que los arquitectos españoles se destaquen a nivel internacional, como lo confirma la exposición del MoMA en 2006 que celebró la arquitectura española.
Además de los arquitectos españoles que han dado forma a este panorama, también han llegado despachos internacionales, como los de Norman Foster y Gensler. Estos profesionales han aportado nuevas ideas y han colaborado en grandes proyectos, incluyendo estadios y museos, lo que enriquece aún más el escenario arquitectónico en España.
La internacionalización es una nota clave en este tiempo, reflejando un interés creciente por la arquitectura española en el mundo. El despacho RCR ha llevado su trabajo incluso a Dubái, mostrando que el buen diseño no tiene fronteras. En tiempos donde lo económico afecta a la industria, la belleza y significado de las obras siguen siendo un esfuerzo digno de celebrar.