La Reacción del PP Catalán ante el Informe de la UCO
Hace dos semanas, cuando se conoció el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil relacionado con el caso Cerdán, en el PP catalán hubo sonrisas internas. El nombre de Salvador Illa, el presidente de la Generalitat, aparece en unas transcripciones telefónicas. Esto les brindó al PP la oportunidad que necesitaban para cuestionar no solo las políticas del PSC, sino también a Illa directamente. Así, el PP exigió explicaciones y acusó a Illa de ocultar información, aunque este no enfrenta acusaciones formales.
“Quien calla, otorga”, repite el portavoz del partido en el Parlament, Juan Fernández, en respuesta a esta nueva estrategia más incisiva contra el líder socialista. Las insinuaciones del PP para debilitar a Illa, pese a que no tiene acusaciones en su contra, recuerdan las tácticas agresivas que utilizó Núñez Feijóo contra el presidente del Gobierno Pedro Sánchez en el Congreso.
Según una fuente interna del partido en Cataluña, su estrategia se basaba en criticar los acuerdos del PSC con partidos independentistas, quienes han logrado más beneficios desde la oposición que cuando estaban en el poder. Con el nombre de Illa mencionado en el informe de la UCO, ahora el enfoque está en aumentar la presión directa sobre él.
La semana pasada, el PP solicitó que Illa compareciera formalmente en el Parlament, marcando un cambio en su estrategia. Durante una sesión de control, le bombardearon con preguntas relacionadas con la supuesta corrupción de antiguos líderes socialistas. Las reacciones visiblemente molestas de Illa llamaron la atención del PP, que considera necesario seguir insistiendo en este tema.
El pasado miércoles, Fernández afirmó tener “más dudas que antes”, ya que Illa “ha estado una semana en silencio, lo que aumenta la sospecha de que hay más de lo que se revela en los audios”. Al día siguiente, cuando todos los ojos estaban puestos en el Tribunal Constitucional respecto a la ley de amnistía, el diputado mantuvo su retórica acusatoria, destacando que Illa había permanecido callado, a pesar de defender la ley ese día.
Desde el PP entienden que esta dureza tiene un doble propósito: desgastar a Illa, quien es considerado el político mejor valorado en Cataluña, y reforzar la imagen de que ellos son la verdadera oposición en la región. “Somos los líderes de la oposición porque no estamos atados a pactos”, afirman.
El partido también señala que, a pesar de que Junts tiene más diputados, estos no pueden ejercer la oposición deseada debido a su alianza con el PSOE en Madrid. Fernández acusó a Junts de ser cómplices tras bloquear la comparecencia de Illa en una sesión anterior, preguntando por qué habían esperado tanto para exigir explicaciones.
Las relaciones entre el PP y Junts son tensas, y el PP recuerda cómo fueron convocados durante la negociación de los pasados Presupuestos autonómicos sin que se les planteara participar de ningún modo. “Nos informaron de sus intenciones, pero no se consideró nuestra colaboración en ningún momento”, agregan.
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