Análisis de la intervención de Joe Biden en la Casa Blanca
Este jueves fue día de celebración en la Casa Blanca. Entre comida al aire libre, música en vivo y fuegos artificiales, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tuvo un par de intervenciones y algunos momentos improvisados. Desde su desastroso debate de la semana pasada frente a Donald Trump en la CNN, cada aparición de Biden en público es objeto de un escrutinio especial. Este jueves leyó su discurso en las pantallas, pero después bajó del atril y, micrófono en mano, dijo algunas palabras más. Dejó claro que no tiene intenciones de retirarse de la política.
Las presiones de diversos sectores para que Biden abandone la carrera presidencial han ido en aumento en los últimos días. Existe la preocupación de que el presidente no pueda vencer a Trump en las elecciones del 5 de noviembre, ya que este ha aumentado su ventaja en las encuestas. Además, los congresistas demócratas que buscan la reelección en la misma fecha temen que la mala racha de Biden afecte a todo el partido.
Biden es consciente de la importancia de estos días y de la necesidad de despejar las dudas sobre su agudeza mental. Durante una reunión con gobernadores demócratas en la Casa Blanca, bromeó sobre su salud, mencionando que lo único que fallaba era su cerebro. También admitió que necesita descansar más y limitar sus actividades nocturnas para poder estar fresco durante el trabajo. Más tarde, afirmó a los gobernadores que había sido examinado por su médico después del debate, a pesar de que horas antes la portavoz de la Casa Blanca había negado esto.
A pesar de estos mensajes preocupantes, Biden ha intensificado su agenda para demostrar que está en buena forma. Durante el evento en la Casa Blanca, un asistente le dio ánimos, a lo que Biden respondió con determinación. Sus intervenciones formales fueron breves, pero se espera que próximamente participe en más eventos para demostrar su capacidad y liderazgo.
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El presidente realizará un mitin en Madison (Wisconsin) y concederá una entrevista en horario prime time. La próxima semana, será anfitrión de la cumbre de la OTAN en Washington, donde se espera que responda a diversas preguntas. Biden se esfuerza por convencer a su partido, a sus donantes y a los votantes de que está listo para un segundo mandato. Su camino no será fácil, pero está decidido a demostrar su valía.
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