El uso del chip en el balón de fútbol para decisiones VAR
En la última jugada del partido, el árbitro invalidó el gol de Lukaku (el segundo de la tarde), generando una imagen peculiar. El árbitro turco Meler recurrió al VAR y, además de mostrar la imagen de Openda tocando el balón con la mano al intentar controlarlo, se pudo ver el sensor incorporado en el balón, el cual ayudó a determinar que, efectivamente, hubo un contacto con el esférico.
Por primera vez, el balón cuenta con una tecnología llamada Connected Ball, desarrollada por Adidas, que contribuir a las decisiones del VAR en situaciones como la que llevó a anular el gol de Lukaku. Este balón ‘avisará’ si ha habido un toque, lo que facilitará la definición de la autoría de algunos goles en duda.
Funcionamiento del chip en el balón
El balón seleccionado por la UEFA posee un sistema de suspensión en su centro, que alberga y estabiliza un sensor de movimiento IMU de 500 Hz, el cual funciona con una batería recargable. Este sensor, anclado a la pelota, se activa gracias a unos tensores.
Al combinar los datos de posición de los jugadores con inteligencia artificial, esta innovación contribuye a la tecnología semiautomatizada de fuera de juego de la UEFA y será crucial para agilizar las decisiones en los partidos. Desarrollada en colaboración con Kinexon, esta tecnología puede asistir a los árbitros del VAR a identificar cada toque individual del balón, reduciendo el tiempo empleado en resolver situaciones de manos y penales.
Mediante hasta 29 cámaras que capturan el movimiento de los jugadores, se logra determinar el momento exacto y el punto de contacto entre el jugador y el balón. Incluso, los sensores pueden determinar si el balón es tocado con la mano u otra parte del cuerpo.
El nuevo balón, llamado Fussballliebe (amor por el fútbol en alemán), muestra predominancia de blanco con toques de negro, amarillo, rojo y verde. Además de representar cada estadio del torneo junto al nombre de las ciudades anfitrionas, este balón está fabricado con materiales biológicos más sostenibles que los anteriores balones oficiales de Adidas, incluyendo fibras de maíz, caña de azúcar, pulpa de madera y caucho.