Luis Gilberto Murillo busca la presidencia en 2026
El excanciller Luis Gilberto Murillo (nacido en Andagoya, Chocó y de 58 años), ha declarado su intención de postularse a la presidencia en las elecciones de 2026. En un video publicado en sus redes sociales, afirmó: “No soy el candidato de ningún político, pero estoy consciente de que nuestro país necesita un candidato diferente, uno que represente realmente al pueblo”. Este mensaje llega tras su renuncia como ministro de Exteriores a finales de enero, y se nota que intenta distanciarse del presidente Gustavo Petro, quien lo nombró en el gabinete, sin mencionarlo directamente. Murillo, conocido por su capacidad de diálogo, se posiciona como una alternativa a la polarización política actual.
El político también exministro de Ambiente dijo: “No creo en muros ni divisiones. Creo en puentes. No creo en líderes autoritarios, sino en el poder del pueblo”. Murillo se presenta como un candidato independiente y asegura que, aunque ha trabajado en diferentes gobiernos, no tiene “etiquetas ni herencias”. Destaca su tiempo en la Cancillería como el mayor honor de su vida. Como embajador en Washington, trabajó en pro de oportunidades para las regiones olvidadas de Colombia.
Murillo es uno de los afrodescendientes más prominentes en la política colombiana. Creció en Andagoya, un pueblo pequeño y minero. Su trayectoria lo llevó a vivir en Rusia, donde estudió ingeniería de minas. Regresó a Colombia para participar en el movimiento estudiantil que ayudó a crear la Constitución de 1991. Después de enfrentarse a un secuestro, se refugió en Estados Unidos, donde obtuvo la nacionalidad y estableció relaciones con algunos políticos influyentes. Luego regresó a Colombia y fue elegido nuevamente como gobernador, gestionando programas para el desarrollo de la región del Pacífico y su población afro.
En las elecciones presidenciales de 2022, fue parte de un liderazgo político que apoyó a Petro en la segunda vuelta, tras haber sido candidato a la vicepresidencia con Sergio Fajardo en la primera vuelta. Murillo también resaltó su apoyo a Francia Márquez, una líder afrocolombiana, buscando la inclusión de más voces en el ámbito político.
Como embajador en Washington, Murillo tuvo que renunciar a su ciudadanía estadounidense. Desde allí, mantuvo un vínculo directo con Petro y jugó un papel importante en las relaciones con el gobierno de Joe Biden. En su papel de canciller, tuvo que enfrentar la compleja relación con Venezuela y negoció para encontrar soluciones en medio de las tensiones políticas. A pesar de varios desafíos, logró resolver conflictos de manera eficiente y fortalecer las relaciones diplomáticas del país.