Investigación de la UCO sobre Acciona afecta a varias partidas de fondos europeos

La Investigación a Acciona por Sobornos en Obras Públicas

La constructora Acciona mostró sorpresa el pasado jueves al enterarse del informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que la señala por un posible pago de sobornos a cambio de contratos de obras públicas. Esta reacción también es compartida por altos funcionarios del Ministerio de Transportes. Se investiga cinco proyectos, otorgados entre 2018 y 2021, cuando José Luis Ábalos lideraba el departamento, los cuales suman más de 500 millones de euros. La UCO ha encontrado evidencias de que Acciona repartió 620.000 euros en pagos y que existen 450.000 euros en pagos no realizados. Los supuestos beneficiarios de estos sobornos incluyen a Ábalos y su asesor Koldo García, junto con Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, y Fernando Merino Vera, director de Acciona en La Rioja y Navarra.

Este caso podría tener repercusiones en Bruselas. Los concursos investigados, organizados por Adif y la Dirección General de Carreteras, presentaron coincidencias preocupantes: fueron abiertos a otras empresas, recibieron múltiples ofertas, y Acciona fue la ganadora en varios procesos, gracias a su excelente puntuación técnica. Además, estos proyectos fueron cofinanciados con fondos europeos, lo que podría llevar a la Unión Europea a investigar por su cuenta.

La presencia de fondos europeos en estos proyectos es significativa. Por ejemplo, parte del presupuesto para el soterramiento de la red ferroviaria en Murcia, que Acciona ganó junto a Ferrovial por 159 millones de euros, proviene de los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER). Estos fondos también están involucrados en la construcción del Corredor Mediterráneo, confiado de nuevo a la alianza Acciona-Ferrovial, y en otros proyectos en Barcelona. Si se inicia una investigación por parte de la Fiscalía Europea, la justicia europea podría tomar control del caso, lo que podría resultar en sanciones para los involucrados.

Acciona ha anunciado que llevará a cabo una investigación interna sobre estos contratos. Se ha discutido dentro del Ministerio de Transportes sobre si se debe auditar las licitaciones de obras públicas durante el tiempo de Ábalos. La decisión tomada fue colaborar con las autoridades, en lugar de realizar una auditoría similar a la que se llevó a cabo sobre los contratos de mascarillas, que fue vista como una persecución política.

Por otra parte, Fernando Merino, quien estuvo al frente de Acciona en La Rioja y Navarra, fue despedido en 2021, y su salida se atribuyó a una pérdida de confianza, aunque no necesariamente relacionada con el caso actual. En una reunión con Ábalos en 2018, se mencionó que el encuentro fue meramente protocolario, y Acciona ha negado cualquier comunicación comprometedora entre sus directivos y los funcionarios implicados.

Con el silencio que rodea a Acciona en el sector de la construcción, es vital entender que estos contratos tienen un gran valor. Los proyectos como el del Corredor Mediterráneo son de vital importancia para la infraestructura de España y han sido objeto de atención pública y crítica. La situación actual exige transparencia y justicia en la adjudicación de las obras para garantizar la confianza del público en la administración de estos importantes contratos.

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