El Héroe Mendilibar lleva al Olympiacos al Olimpo
Se podría decir que el fútbol nació en Grecia. Quizás no el deporte tal como lo conocemos hoy en día, pero la FIFA reconoce que el Episkyros, que significa «defensor», es una de las primeras formas que representan a este juego, como se puede ver en un relieve que data entre los años 375-470 a.C.
Desde entonces, el fútbol griego nunca había obtenido un título europeo en la categoría de clubes. El Panathinaikos jugó y perdió una Copa de Europa en 1971. La Eurocopa de 2004 sigue siendo el mayor éxito hasta la fecha de este deporte en el país que inventó la democracia.
Ha tenido que llegar un entrenador vasco de 63 años, con la ilusión renovada de un niño, para llevar al Olympiacos al Olimpo. Jose Luis Mendilibar Etxebarria, quizás no por la puerta más grande, pero tampoco por la de servicio.
Mendilibar aplaude a los suyos.
AFP
Los doce trabajos de Heracles fueron un desafío colosal para el semidiós hijo de Zeus y la reina mortal Alcmena. Del mismo modo, fue un desafío coger al explosivo equipo griego, con tres entrenadores despedidos esta temporada, y clasificarlo tercero en la Superliga Griega, llevándolo a la final de la Conference League. Finalmente, tras una final muy reñida, logró ganarla.
No fue un camino sencillo. Como Heracles, Mendilibar tuvo que enfrentarse al León húngaro (Ferencvaros), luego vencer a la hidra israelí (Maccabi Tel Aviv) remontando un 1-4 con un histórico 1-6, superar al toro turco (Fenerbahce) y vencer al villano inglés (Aston Villa) para llegar a las puertas del Olimpo.
La última prueba fue la más difícil. Un equipo italiano liderado por (Vincenzo) Italiano, pero con buen pie y poca actitud defensiva. De los cinco medios, el conocido por la afición española, Arthur Melo, ex jugador del Barcelona, era el menos ofensivo de los centrocampistas. Las puertas del Olimpo tenían que ser defendidas primero y luego conquistadas.
El primer héroe fue Tzolakis, un muro que impidió que la Fiorentina accediera al Olimpo. Sus intervenciones para detener a Bonaventura en la primera parte y a Kouame en la segunda fueron decisivas. Luego, destacó Iborra, un veterano que se apunta a todas las batallas y anotó un gol de cabeza para adelantar a su equipo en el minuto 80.
El éxito aguardaba al final del camino para un entrenador con más experiencia en evitar descensos que en luchar por títulos, pero su paso por el Sevilla le permitió lograr ambas cosas. ¿Por qué no repetir la hazaña? No es fácil, solo cinco han logrado lograrlo antes que él.
Los cinco héroes
El primero fue Nereo Rocco en 1968 (Recopa) y 1969 (Copa de Europa), luego Bob Paisley con el Liverpool en 1976 (UEFA) y 1977 (Copa de Europa). Giovanni Trapattoni lograría los mismos trofeos que Rocco en 1983 y 1984 con la Juventus. Entrando en este siglo, encontramos a otro español, Rafa Benítez, quien consigui la UEFA con el Valencia en 2004 y la Champions en 2005. Por último, debemos mencionar la UEFA de 2003 y la Champions de 2004 del Oporto de José Mourinho. Precisamente, el último entrenador al que venció Mendilibar y al que arrebató la Europa League con el Sevilla el año pasado.
El Olympiacos accede a ese trofeo gracias a otro héroe del que ya alertó el entrenador italiano previamente. El peligro era El Kaabi, lo fue. Como Aquiles lo fue en Troya. Con 33 goles en la temporada, 11 de ellos en la Conference, 5 en la Europa League y 17 en la Superliga griega, el marroquí metió al Olympiacos en el Olimpo en el minuto 116 del partido, dejando una vez más a la Fiorentina con la miel en los labios. Segunda final perdida consecutiva. 63 años han pasado desde su último título europeo. Los hados eran griegos.