Perú en una Encrucijada Política
Perú despertó este miércoles en medio de una gran sorpresa política. El diario oficial El Peruano publicó un anuncio importante: la renuncia del primer ministro Gustavo Adrianzén y de todos los ministros de su gabinete. Mientras los expertos discutían si esto significaba un vacío de poder, extrañas situaciones ocurrían en el Palacio de Gobierno. Algunos ministros que habían dimitido horas antes volvían a ser vistos en la sede presidencial.
El gobierno anunció que tomaría juramento de nuevos ministros al mediodía. Adrianzén había intentado evitar ser censurado por el Congreso, donde enfrentaba críticas por la creciente criminalidad en el país. Aunque el gobierno cambió a algunos ministros clave, esto no fue suficiente para calmar a las diferentes bancadas del Congreso, que rápidamente exigieron la salida de Adrianzén, quien renunció pocas horas después.
Ese mismo día, se llevó a cabo un paro nacional en protesta por las extorsiones y cobros indebidos. Aunque inicialmente las manifestaciones parecían menos intensas, en algunas regiones se bloquearon puentes y se reportaron confrontaciones con la policía. Con cierta tardanza, Boluarte presentó a su nuevo gabinete. Como se esperaba, Eduardo Melchor Arana Ysa fue nombrado presidente del Consejo de Ministros, y otros ministros continuaron en sus puestos habituales.
Muchos parlamentarios coinciden en que se perdió una oportunidad de reformar el gobierno, sobre todo porque la popularidad de la presidenta ha caído drásticamente, alcanzando un 0% de aprobación en el norte del país, según un reciente sondeo de Ipsos. Además, algunos críticos han cuestionado la elección de Arana, quien ha sido vinculado a un caso de corrupción y ha tenido posiciones controvertidas sobre derechos humanos.
Un informe de Cuarto Poder reveló que Arana tuvo numerosas conversaciones entre 2011 y 2018 con uno de los líderes de una red de corrupción. Esto ha generado dudas sobre su integridad desde que fue nombrado ministro. En menos de un año, Arana se convierte en el cuarto primer ministro de Boluarte, lo que resalta la inestabilidad de su mandato. Desde que asumió la presidencia en diciembre de 2022, ha nombrado a 66 ministros, es decir, un promedio de 13 días por cada uno en sus cargos.
La comunidad empresarial ha expresado su preocupación y ha solicitado un orden político básico para poder avanzar económicamente. «Solo pedimos una visión clara de Perú y trabajo en conjunto», declaró Jorge Koechlin, presidente de la Cámara Nacional de Turismo.
Más tarde, el Congreso aprobó el viaje de la presidenta al Vaticano para asistir a la misa del inicio del pontificado del papa León XIV. Boluarte invitó también al presidente del Congreso y a la presidenta del Poder Judicial, aunque esta última rechazó la invitación. Varios congresistas ya han indicado que no apoyarán al nuevo gabinete, que está compuesto por caras conocidas.