Detención del Alcalde de Newark: Un Caso de Autoritarismo
A **Ras J. Baraka**, alcalde de **Newark**, fue arrestado recientemente en un lugar donde, en los últimos meses, había hablado junto a activistas y vecinos descontentos por la apertura de un centro de detención de migrantes relacionado con la era de **Trump**. El 9 de mayo, agentes del **Servicio de Inmigración y Control de Aduanas** (ICE) lo detuvieron cerca de Delaney Hall, y enfrenta un juicio por el cargo de **allanamiento**. Este arresto ha generado más apoyo entre los demócratas en el estado y podría ayudar en su posible nominación para gobernador. Casi inmediatamente después de su liberación, Baraka expresó su opinión, afirmando que esto es un claro ejemplo de **autoritarismo**.
“No podemos arrestar a las personas solo porque no piensan igual que nosotros”, declaró Baraka, al salir del tribunal federal en Newark. “No es correcto identificar a quienes tienen opiniones diferentes a las nuestras, ni tomar sus fotos o huellas dactilares solo porque creemos que están en desacuerdo”, agregó.
Baraka, un poeta de 55 años, no solo es el alcalde número 40 de Newark, sino que es conocido por sus políticas **progresistas** que han ayudado a reducir el **desempleo** y la **delincuencia** en la ciudad. También ha promovido el acceso a **vivienda** y tecnología. Se opone abiertamente a las políticas antiinmigrantes del presidente Trump y se comprometió a proteger a la comunidad indocumentada de Newark. Baraka ha insistido en que haría lo posible para cerrar el Delaney Hall, enfatizando que ese centro **no es bienvenido**.
Sin embargo, a principios de mayo, Delaney Hall, operado por **GEO Group**, comenzó a recibir a sus primeros detenidos. Este es el segundo centro de detención en Nueva Jersey, con capacidad para más de 1.000 personas, y está estratégicamente ubicado cerca de un aeropuerto, lo que facilita la deportación rápida de los detenidos.
Organizaciones y activistas han criticado la apertura de este centro, tanto por el estrés que causa en la comunidad como porque GEO Group no había obtenido los permisos necesarios para operar. Baraka ha amenazado con llevar a esta empresa ante los tribunales si continúan violando la ley, pero irónicamente, él mismo ha terminado en la corte.
En el día de su arresto, mientras se encontraba en una protesta en Delaney Hall, Baraka fue confrontado por agentes federales, quienes impidieron su entrada al centro, a pesar de que afirmaba tener permisos. También estaban presentes algunos congresistas, pero le dijeron que ellos eran “diferentes” y que podía ser detenido. Este incidente ha desencadenado un debate importante en el ámbito político, con declaraciones de funcionarios que sugieren que este arresto es más una maniobra política que un acto legítimo.
El alcalde afirma que no es responsable de lo que ocurrió y sostiene que la situación actual en el país es preocupante. Se enfrenta a cargos de allanamiento que podrían llevarlo a prisión por un mes. Sus abogados planean pedir la desestimación de los cargos, ya que consideran que se trata de un **ataque político** contra él. Raymond Brown, uno de sus defensores, comparó el caso de Baraka con los eventos del **6 de enero de 2021**, reafirmando que lo que ellos hicieron fue verdaderamente asaltar, mientras que Baraka solo protestaba.